Estamos ante una de las rutas más divertidas y juguetonas de la Zona Media. Los primeros kilómetros sirven de enlace con la zona de senderos entre los Castros de Santa Cecilia y Oiamburu. El Quejigo de Garinoain, Monumento Natural de Navarra, nos conduce a las sendas del entorno de la Ermita de Santa Cecilia, antiguo poblado fortificado que, rodeado de fosos y restos de murallas, marcará el inicio de la zona más divertida de la ruta.
Desde ese momento, comenzaremos a enlazar un sendero tras otro de forma fluida, remontando hasta el Castro de Oiamburu que domina el paisaje, desde donde contemplamos infinitas vistas sobre numerosos montes y pueblos que se pierden en el horizonte. Sólo nos queda regresar por caminos al punto de origen saboreando la experiencia vivida.
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Puntos de agua: Garínoain y Pueyo.
Época recomendada: Todo el año, excepto los días más calurosos del verano.
Ruta con varios kilómetros de senderos, de dificultad moderada.